A continuación tres asombrosos experimentos con el ADN que prueban las cualidades de autosanación del ADN de acuerdo con los sentimientos de la persona, tal como reportó Gregg Braden en su programa titulado “Sanando Corazones/Sanado Naciones: La Ciencia de La paz y el Poder de La Plegaria” (similar a las investigaciones del premio nobel Luc Montagnier - https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/20640822/): EXPERIMENTO #1: El primer experimento fue realizado por el Dr. Vladimir Poponin un biólogo cuántico. En este experimento se comenzó por vaciar un recipiente y luego lo único que se dejó dentro fueron fotones o partículas de luz. Se midió la distribución espacial de estos fotones y se encontró que estaban distribuidas aleatoriamente dentro del recipiente. Este era el resultado esperado. A continuación se colocó dentro del recipiente una muestra de ADN y la localización de los fotones se midió de nuevo. En esta ocasión los fotones se organizaron a lo largo del ADN. En otras palabras, la presencia del ADN produjo un efecto medible en los fotones. Ahora viene lo sorprendente: A continuación la muestra de ADN fue removida del recipiente y la distribución de los fotones fue nuevamente medida. Los fotones permanecieron ordenados en sus anteriores posiciones, como si el ADN todavía estuviera presente. Entonces, ¿ A qué están conectadas las partículas de luz? Según Gregg Braden este experimento nos obliga a concluir que existe un nuevo campo de energía y que el ADN se está comunicando con los fotones por medio de este campo. EXPERIMENTO # 2: Unos milxitarxes de EEUU recolectaron una muestra de leucocitos de cierto número de donantes. Estas muestras se colocaron en una habitación equipada con un equipo de medición de los campos eléctricos. En este experimento el donante era colocado en una habitación y sometido a «estímulos emocionales» consistentes en video clips que generaban emociones fuertes en el donante. El ADN era colocado en un lugar diferente al del donante, pero en el mismo edificio. Ambos, donante y ADN, eran monitoreados y cuando el donante mostraba cambios emocionales bruscos (medidos como ondas eléctricas) el ADN expresó al mismo tiempo respuestas eléctricas idénticas. No hubo tiempo de retraso en la transmisión. Los milxitaxres querían saber cuan lejos podían separar al donante de su ADN y continuar observando este efecto. Ellos dejaron de hacer pruebas al llegar a una separación de 80 kilómetros entre el ADN y su donante, teniendo siempre el mismo resultado y sin ningún retraso en la transmisión.¿Qué significa esto? Según Gregg Braden, ésto significa que las células vivas se identifican con una forma de energía no detectada con anterioridad. Esta energía no se ve afectada ni por la distancia ni por el tiempo. Esta no es una forma de energía localizada, es una energía que existe en todas partes y todo el tiempo. EXPERIMENTO #3: El tercer experimento fue realizado por el Instituto Heart Math y el paper que lo soporta tiene este título: “Efectos locales y no locales de frecuencias coherentes del corazón y cambios en la conformación del ADN”. En este experimento se tomo el ADN de placenta humana (la forma más pura de ADN) y fue colocado en un recipiente donde se podía medir los cambios del mismo. Se distribuyeron 28 muestras en tubos de ensayo al mismo número de investigadores previamente entrenados. Cada investigador había sido entrenado para generar y percibir sentimientos, y cada uno de ellos podían tener fuertes emociones. Lo que se descubrió fue que el ADN cambia de forma en función de los sentimientos de los investigadores: (1). Cuando los investigadores sintieron gratitud, amor y aprecio, al ADN respondió relajándose y sus filamentos estirándose. Es decir, el ADN se hizo más largo. (2). Cuando los investigadores emitieron rabia, miedo o estrés, el ADN respondió encogiéndose. ¿Alguna vez se han sentido «descargados» por emociones negativas? ahora saben por qué sus cuerpos también se descargan. Los códigos del ADN se reactivaron cuando los investigadores tuvieron sentimientos de amor, alegría, gratitud y aprecio. Este experimento fue posteriormente aplicado a pacientes con VIH positivos. Ellos descubrieron que los sentimientos de amor, gratitud y aprecio crearon 300.000 veces mayor respuesta inmune que la que tuvieron sin ellos. Así que aquí tenemos una respuesta que nos puede ayudar a permanecer con salud, sin importar cuan dañino sea el virus o la bacteria que este flotando alrededor, y esto es manteniendo los sentimientos de alegría, amor, gratitud y aprecio. Estos cambios emocionales fueron más allá de ser efectos electromagnéticos. Los individuos entrenados para sentir amor profundo fueron capaces de cambiar la forma de su ADN. Gregg Braden dice que esto ilustra una nueva forma de energía que conecta toda la creación. Esta energía parece ser una red estrecha que conecta toda la materia. Esencialmente podemos influenciar esa red de creación por medio de nuestra vibración espiritual. RESUMEN: ¿Qué tiene que ver los resultados de estos experimentos con nuestra situación presente? Esta es la ciencia que nos permite escoger una línea de tiempo que nos permite estar a salvo, no importa lo que pase. Como Gregg explica en su libro “El Efecto Isaías”, básicamente el tiempo no es solo lineal (pasado, presente y futuro) sino que también tiene profundidad. La profundidad del tiempo consiste en todas las líneas de tiempo y de oración que puedan ser pronunciadas o que puedan existirn. Esencialmente, todas las oraciones ya han sido respondidas. Simplemente actualizamos la que estamos viviendo por medio de nuestros sentimientos. Así como creamos nuestra realidad, al escoger una línea temporal con nuestros sentimientos. Nuestros sentimientos están activando la línea de tiempo por medio de la red de creación, que conecta la energía y materia del universo. Recuerda que la ley del Universo es que atraemos aquello en lo que nos enfocamos. Si te enfocas en temer cualquier cosa sea la que venga, estas enviando un fuerte mensaje al Universo para que te envíe aquello a lo que le temes. En cambio si te puedes mantener con sentimientos de alegría, amor, aprecio o gratitud, atraerás lo positivo y evadirás lo negativo.